Estimadas familias, a la vista de la de casos que, tristemente, llegan a nuestras manos en los que percibimos la utilización o manipulación de los menores cuyos padres están inmersos en una separación, hemos decidido iniciar una serie de artículos donde nuestra psicóloga Paula Ronco abordará el Síndrome de Alienación Parental (SAP).

¿Qué es el síndrome de alienación parental (SAP)?

síndrome de alienación parentalEl Síndrome de Alienación Parental o SAP fue propuesto por Gardner (1985) al observar un cuadro de signos, síntomas y comportamiento en menores involucrados en disputas legales sobre su custodia.

Gardner observó que en muchos de estos menores existían sentimientos de rechazo hacia uno de sus progenitores: el progenitor “malo” es odiado y rechazado, mientras que el progenitor “bueno” es amado e idealizado.

Esta dicotomía que expresa el menor, puede ser el resultado de la influencia del progenitor “programador”, y las propias contribuciones del menor para despreciar al progenitor “diana”.

Gardner (1992, 1998) describe una serie de síntomas necesarios, que se deben de dar cómo cuadro completo, para poder diagnosticar este síndrome:

  • No debe haber evidencia de abuso o negligencia por parte del progenitor “diana”.
  • Campaña de denigración: obsesión del menor por odiar a uno de los padres.
  • Justificación irracional del desprecio: el menor plantea argumentos irracionales y a menudo ridículos.
  • Ausencia de ambivalencia: no muestran sentimientos encontrados ni dudas sobre sus afirmaciones.
  • Fenómeno del “pensador independiente”: niegan orgullosamente que el progenitor “programador” le haya expresado alguna opinión sobre el otro progenitor.
  • Apoyo incondicional al progenitor “programador” en el conflicto parental.
  • Ausencia de culpa hacia la crueldad y la explotación del progenitor “diana”.
  • Presencia de argumentos ensayados, con palabras que no son propias de su edad.
  • Extensión de la animadversión a la familia del progenitor “diana”.

Posteriormente, otros autores han sugerido más indicadores:

  • Contradicciones.
  • Expresión de información inapropiada e innecesaria sobre la ruptura de sus padres y proceso legal
  • Marcada ausencia de pensamiento complejo acerca de las relaciones.
  • Muestra una sensación de urgencia y fragilidad.

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